Limpieza de cutis
Elimina impurezas y células muertas, remueve puntos negros y regula el acné, piel más suave y tensa.
¿Qué es?
La limpieza de cutis es un procedimiento que no es agresivo, destinado a mejorar el aspecto de la piel, corregir la dilatación de los poros, eliminar las células más superficiales y extirpar los famosos «puntos negros o barritos» (en dermatología denominados «comedones») y los microquistes que se van acumulando con el tiempo. Las glándulas sebáceas producen una sustancia grasosa llamada sebo, que se vacía en la superficie de la piel a través de los orificios de los denominados «folículos polisebáceos». Muchas veces este sebo junto con bacterias y células taponan el orificio de desembocadura de la piel, se van acumulando en los poros y forman los comedones o barritos. El color oscuro del barrito no tiene que ver con la falta de higiene, es consecuencia del depósito de un pigmento (la melanina). Si los barritos se inflaman, se convierten en granos; por eso es importante extraerlos. Sin embargo, la extracción debe realizarla un profesional, ya que la presión con las uñas puede producir la rotura del folículo, lo que puede generar a su vez inflamación y en algunos casos una cicatriz. En cuanto al número de sesiones que se deben realizar, es importante saber que varían según el tipo de piel, pero comúnmente se realizan una vez al mes.
La importancia del masaje en la limpieza facial, además de relajar cuerpo y mente, destensa los músculos de cara y escote, aumenta la circulación sanguínea, por lo que la piel gana en oxigenación, y prepara la piel para la aplicación de la mascarilla. Tu rostro dice mucho de ti, y es lo primero en lo que se fijarán en una primera impresión, si quieres que inspire frescura, salud y energía, regálate una limpieza facial. |
Beneficios de la limpieza de cutis:
|